Donde iréis, tu guía gastronómica de siempre

lunes, 27 de septiembre de 2010

MARKETING EXTREME II, el regreso del DIN A4


ARROZ CON HABICHUELAS


Se me ha caido un mito.
De los gordos.
Tantos años perfeccionando la técnica, esperando encontrar una prueba en alguna bolsa y resulta que era imposible. Que ni podía pasar, ni hubiera pasado, los controles de calidad, no sé si me explico.




Pues me acabo de enterar de que las pipas de girasol peladas no las producen una secta secreta de abuelas desdentadas, ocultas en silos nucleares abandonados de la Hurdes o por ahí (como todos, no me digan que no, pensabamos).

No. Resulta que lo hacen unas MAQUINAS de esas plateadas que meten mucho ruido.




Al final va a resultar que Niño Becerra tiene razón y todo se va a ir a la mierda, más o menos como en Terminator 2.


Pero, ¡coño!, que lo podían haber avisado.


BSO:

miércoles, 22 de septiembre de 2010

GLOBALIZACION


EL CUERPO HUMANO, ¡QUE EXTRAÑO QUE ES!



Esto es un flemón.


Que visto así, de cerca y en cuerpo ajeno, como que no molesta. Pero no se imaginan ustedes lo que duele.


Uno ve las estrellas al más mínimo movimiento, no puede dormir, se droga como si tuviera 20 años, se pliega a las exigencias de un pseudomédico y se toma antibióticos de nombre impronunciable que pueden acabar con tu vida en un enjuagar el vaso..., vamos, que todo es un despropósito.

Despropósito que finaliza justo en el momento que se pincha la bola de pus como si de una vulgar espinilla se tratase. Enjuague, limpieza, espidifén y a dormir.


Esta es Esperanza Aguirre, la presidenta de la comunidad de Madrid.


Que vista así, de cerca, como que no molesta...


Se destapa el fraude Pedro Piqueras


Resulta que Pedro Piqueras es el convincente rostro de un dúo de conveniencia pergeñado por las agencias de noticias. Dispuestas a que desapercibiéramos las falacias que nos metían dobladas en cada telediario, buscaron una adecuada combinación de voz y físico que distrajera a los telespectadores del fondo del asunto. Pedro Piqueras es un modelo de ropa interior con voz de pito, y es este ser jocoso, que dice ser oriundo de Alcobendas, el que pone la voz. Como Mili Vanili, pero más retorcido. Como José Luis Moreno y el cuervo Urraco, pero en este caso es el muñeco quien lleva la voz cantante y sonante, toma Moreno.
Y el dúo ha resultado ser súmamente efectivo. A él debemos creencias tan falsas como que a la manifestación contra el retraso en la edad de jubilación no fue nadie (yo sí fui) o que Obama es negro, cuando en realidad es, como mucho, mulato. De esto sólo me he dado cuenta cuando le he quitado el volumen a la tele, tal es el embrujo de esa voz profunda.

martes, 21 de septiembre de 2010

Intentos de fuga



Se sospecha que la verdadera intención del Papa al visitar Inglaterra era tratar de huir hacia la iglesia anglicana con lo puesto.

- El anglicanismo no sé qué es, pero lo de uno y trino tampoco entra en cabeza humana - dicen que ha confesado - y en mi actual puesto me están cayendo más hostias de las que reparto, lo cual no deja de ser paradójico.

Afortunadamente, el obispo de Canterbury ha caído en la cuenta de que acoger al Papa suponía una unificación de iglesias, lo que automáticamente le convertiría en católico-anglicano (y en algunas cosas peores). Temiendo salir derrotado en la lucha por el control de esa nueva congregación, ha impedido la unión.

- Al ser sólo obispo, por muy Canterbury que sea, tengo menos poderes mágicos que Gandalf, de modo que en un mano a mano contra el Papa lo tendría todo perdido, incluso aunque Juan Tamariz estuviera de mi parte, como ha prometido hacer.

Ante la negativa anglicana, y acosado por el sentido demasiado amplio con que algunos teólogos están interpretando la frase dejad que los niños se acerquen a mí, el Papa decidió fingir su propia muerte, para lo que contrató a seis barrenderos católicos. Los católicos se negaron a participar en el paripé so pena de perder su alma inmortal por magnicidio fingido. Tras probar suerte con evangelistas, nestorianos, monofisitas, simonitas y gomorritas, por fin dio con los únicos dispuestos a atentar contra él de forma falsa: seis barrenderos que decían ser musulmanes, pero que no creían ni en sí mismos.

- Sólo creemos en el poder transformador de las artes escénicas- han comentado a los medios los seis acusados.
- ¡Y de las performances! - detalla a voz en grito el más alto de todos ellos.

Al descubrir que acababa de contratar a seis pirados del teatro callejero que pensaban liquidarlo por el método Stanivslasky, Benedicto se vio obligado a destapar la conjura, dado que no encontraba demasiada diferencia entre espicharla por el método Stanivslasky y espicharla sin más, tal era el talento interpretativo de los seis actores.


Finalmente, Benedicto se ha visto obligado a regresar al Vaticano, donde el concilábulo cardenalicio lo aguardaba reunido.

- Tú de aquí no vuelves a salir.
- Es que tengo un poco de prisa que he quedao esta tarde para evangelizar unos esquimales ahí en el polo norte...
- ¡Que no!

lunes, 20 de septiembre de 2010

Coraje español


En cualquier lugar del mundo ven un fantasma y se mean del susto. En España no. En España se te solidifica en el asiento del acompañante la chica de la curva, con el camisón de loca, esas ojeras de mapache y los ojos en blanco nuclear, y la mitad de los conductores tratan de ligársela a base de piropos escalofriantes, tipo, te comía tol estoplasma, qué me tiés loco por resobarte el culo, lechona.

El caso es que, siguiendo con este coraje tan español, dice Iker Jiménez que a un tal Gorgonio, que trabaja en una central nuclear (lo que ya da indicio de su valor), se le aparece en una carretera comarcal el fantasma de una niña vestida de comunión, que no sé yo si habrá cosa más acojonante, decadente, pompolluda y siniestra. El hombre, consciente de que no es más que una aparición, pasa de largo sin mucho aspaviento.

Dos años después se le vuelve a aparecer la comunionada del infierno en la misma carretera que Gorgonio transita a diario, y ni corto ni perezoso, pasa, la ve, contínúa unos metros, se dice, qué coño, y da la vuelta, por ver de pillarla. No la encuentra. Pero tendrá otra oportunidad.
Un año después se le vuelve a representar la pepona pompolluda del averno con sus encajes blancos mortaja, y entonces Gorgonio baja la ventanilla y le pregunta a la criatura: ¿qué? ¿andas perdida o qué te pasa?

Ante pregunta tan directa e inesperada, la pepona comunionada huye espantada, claro. Y nuestro amigo Gorgonio, ¿acaso se amedrenta? ni mucho menos. Nuestro amigo Gorgonio es español, y aquí, si no tememos a los vivos, sean humanos o toros de lidia, menos aún vamos a temer a los muertos, que no tienen cuernos. Así que Gorgonio se baja del coche y se lanza a correr tras la pepona, como los cazafantasmas, pero en plan encierro pamplonica.

Que yo conozca, es el primer caso en que el fantasma, presa del terror, huye del vivo al que debería asustar. Pero es que España es así. Peculiar.
El caso es que la pepona consiguió diluirse en la nada, y creo que tardará en volver a las andadas, después del miedo que ha pasado.


jueves, 16 de septiembre de 2010

LA NUEVA SENSACION


Nuestra red de espías secretos nos informa de algo que es posible que cambie el mundo de la música para siempre.

No, no se trata de fundamentalistas quemando mp3.

Esta vez hablamos de un nuevo grupo musical que está revolucionando la música pop en la Gran Bretaña.

Se llaman los Quarrymen y estamos seguros de que les van a encantar!!!!


viernes, 10 de septiembre de 2010

clama al cielo



Me van a disculpar que por una vez me ponga serio.

Los libros no arden, por sorprendente que parezca. El papel sí; lo que contiene, no. Recordad Farenhait 451. Es imposible destruir una idea. Puedes destruir su soporte, pero eso sólo acrecienta su poder de seducción. Cuando a la idea le quitas la ropa, la idea no desaparece; aparece en lencería.

Por eso los libros no pueden destruirse. Sólo pueden rebatirse. Y por esa misma razón, ningún libro es sagrado. Lo sagrado es aquello que debe aceptarse sin preguntar, lo que nadie debe intentar rebatir. Y lo que no se puede discutir, no es una idea. Es una ideología. Es decir, que en lugar de estar de acuerdo con una cosa y no con otra, tienes que estar de acuerdo con todo lo que te digan. Si aceptas la idea que es, digamos, Jesús, tienes que aceptar también la idelología que es la inquisición, que es la que te dice cómo debes entender a Jesús. Da igual lo que diga Jesús o su libro. Lo único que se acata es lo que ordena su intérprete.


Las ideas son muy incómodas, porque son motores de dudas, y las ideologías son muy cómodas, porque, seamos sinceros, es estupendo que alguien te diga dónde está el bien, dónde está el mal, dónde está la sal, a quién tienes que matar y qué premio te vas a llevar por el asesinato. Con lo que consume el cerebro supone un ahorro de energía considerable. Pero el cerebro tiene una cosa curiosa: es un generador de preguntas. Y tarde o temprano te arremete un fogonazo en el que arde la ideología como el napalm. Y se te quedan en pie con el puño en alto las ideas desnudas; y según lo que hayas hecho, lo mismo te parten como un rayo.


Es decir, a lo que hay que pegarle fuego es precisamente a lo que se considera sagrado. Si eso realmente contiene ideas, no hay miedo, van a emerger de entre las cenizas con más fuerza. A Shalman Rusdie intentaron pegarle fuego, pero su idea sigue ahí. Lo de "si algún chalado hace lo mismo que nosotros os matamos" clama al cielo. A todos los cielos.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

CONCENTRACION

La selección española de corredores de encierros de toros.


Yo es que no puedo.



MEADOS Y FIESTA


MOMENTOS CRITICOS DE ANTES DE CENAR



Estando como estamos en el siglo XXI, da gusto comprobar que las buenas tradiciones se mantienen. (...)


Ahora venía una disertación sobre el momento en el que el hombre se convertía realmente en un homínido y dejaba de ser un animal arrastrado por sus impulsos, pero miren, que me parecía una chorrada y que seguro que el señor Selfellatio lo íba a hacer mucho mejor que yo.


Así que les dejo el diálogo, que era lo que tenía "la cosa":




Benemérito.-¡Oigusté, queaquí no se puede parar!


Taxista. -Ya, pero es que estoy cobrando a la seño...


Benemérito-Ni cobrando ni ostias, se me largan pero ya. Pero ya!




Y este ¡Pero Ya! se queda reverberando en la escena hasta el fundido en negro.




El kilómetro cero es una cosa MUY SERIA.







Si reparten las hostias, ¿por qué no reparten los premios?



Bien repartidos hay premios para todos, pero a la mayoría no nos llegan. Normalmente están más amañados que esos perifollos que se concedía a sí misma la leche Pascual, que veías el dibujo en el tetabreak y decías, ¡La leche! ¡Les ha tocao una nave espacial! ¡esto es físicamente imposible labrarlo en metal! ¡viene de otra galaxia!


Supongo que en algún momento de la prehistoria se planteaba el asunto como, vamos a dar un premio a una virtud genérica, y votemos quién es merecedor de él. Ahora parece que viniera a ser, vamos a dar un premio a una persona concreta, pongamos, Gadafi, y a ver qué nos inventamos para que pueda merecerlo. De ahí que las deliberaciones sean arduas, y a menudo infructuosas.


Supongo que esa es la razón por la que los premios se concentran tanto. Julia Roberts recibe una llamada cada diez minutos, como nosotros, pero en vez de ofrecerle los servicios de jazztel, le ofrecen premios. El boñigón de plata a la sonrisa más tonta, el truño de bronce a la protestante con más glamour, y así aletatoriamente. Que debe de tener la mansión con más chismes raros que un todo a cien.


Total, que al final los mortales no vemos un premio en la puta vida y hay cuatro que no recuerdan ni haberlos recibido. Bien es verdad que en algunos círculos mercantiles lo de que nos jubilen a los 67 llega a considerarse como una especie de premio, pero eso es porque en algunos círculos mercantiles consideran que ataviarse con una chaquetilla roja para hacer estampas al amanecer sobre un caballo y azuzar una jauría contra un indefenso zorro es trabajar. Y espérate que en vez de zorros no cacen pensionistas, que en el campo no hay cámaras.


Por cierto, no tengo ni idea de qué premio es el que ilustra este comentario. Puede que sea el premio al mejor lameculos del mes, con lo que tampoco me va a tocar a mí. Lo cual es, a todas luces, otra injusticia clamorosa que avala mi teoría.


jueves, 2 de septiembre de 2010

Ya sólo nos queda lo normal



Todas las noches de domingo espero que Iker Jiménez se sincere y admita: llevamos ya doscientos mil capítulos y no nos quedan más cosas paranormales que contar. Esa es la razón por la que llevo hablando lento desde Septiembre de 2009. Nos quedan cosas para anormales, pero eso ya lo copa sálvamedeluxe, y cosas para normales, pero eso no interesa a nadie, porque no hay nadie normal. Yo, por lo menos, no conozco a nadie que lo sea. Que digas tú, mira qué normal es ése, o mira ese normal que va por ahí. Bueno, yo mismo, que soy el único normal del mundo, pero no voy a hacer cuatro horas de programa pa mí mismo.


En fin, que lo que se dice paranormal, paranormal, por más vueltas que le damos, es que no hay ¿Qué queréis que le haga yo? si es que estoy aburrío de inventar. Hemos estirado el chotacabras para sacar doce horas de emisión a partir de un dibujo que me hice yo mismo en casa, porque al chotacabras en sí no lo ha visto nadie, pero la cosa no da pa más. Se ve que los marcianos se han cansado ya de las terrícolas y no las abducen con objetivos sexuarl; se han avistado humanoides en Extremadura, sí que es verdad, pero nuestro equipo de investigación nos informa sobre el terreno que han resultados ser meros extremeños; y le estamos dando a la ouija en la trastienda, pero no contesta ni dios, están todos ocupados con la de entre fantasmas. Y cada vez que intento mover el vaso, me pillan.


En fin, que yo puedo estar aquí cuatro horas hablando lento porque es mi trabajo, y les leo si quieren el prospecto de la aspirina de aquí a las cuatro de la madrugada, pero el único miedo que les va a dar será cuando lleguemos a las contraindicaciones.