La cagaleira es un nuevo baile-lucha brasileño que consiste en ingerir diez faves de fuca a veinte kilómetros de un váter con el objetivo de indagar en los límites de la resistencia humana. Una pugna desquiciada por el control del propio esfínter.
Lo que hace tan grande a este deporte es que tiene la particularidad de que los sudores que te arranca son fríos en vez de calientes.
Otra ventaja es que a este tipo de lucha no hay forma de calificarla como épica. La lucha es contra uno mismo y su ego. Sirve para rebajar notablemente el sentido de lo que es y no es digno en un ser humano decente, y convierte en apetecibles aquellos lugares donde uno no evacuaría ni borracho.
Es una lucha perdida de antemano, sí, al final quieras o no quieras se va el caimán por la barranquilla, pero entretanto padeces una amplia gama de emociones encontradas. El sufrimiento está asegurado.
Bailar, bailas. Vaya que si bailas.
Aplaudo y animo a los cada vez más numerosos (eso me dicen) lectores a formar la liga profesional de cagaleira....
ResponderEliminar¡Dios, si es que veo hasta las quinielas por tiempo!
"Morrosko de Hernani, 12 minutos
Power Ojete, 10 minutos
Ñemesku, 8 minutos"
¡¡¡AJJAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAAJ!!!
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