En la rotonda más cercana a mi casa hay una de esas horribles composiciones escultóricas con las que los ayuntamientos justifican los desfalcos.
Las estatuas son muy feas, pero lo peor es el concepto de sus mensajes. A LA MUSICA, A LA PINTURA, A LAS LETRAS
Yo no sé que clase de traumas expresan los escultores con estas figuras, a que clase de acuerdos llega el concejal de cultura de turno con los escultores, que clase de encargos reciben los escultores o que clase de encargos entienden los escultores que les piden los concejales, pero yo juraría que algo falla.
El pobre Mondonguito, que está cada día peor de tanto y tanto estudiar, recomienda no mirar a las estatuas de las rotondas.
Y si lo recomienda Mondonguito, por algo será.
Pues esto explica y justifica el movimiento iconoclasta.
ResponderEliminarO mierdiclasta.
O plastaclasta.